En mi caso no está mal, se encuentra en un edificio de estructura metálica de los primeros calculados sísmicamente, uno de los arquitectos que los proyecto vivía justo debajo de mis padres, nosotros en el noveno y el en el octavo. Su nombre era Miguel Abad y fue el primero de los dueños de la Librería Reina Mercedes, que tenía a Paco, el ultimo propietario, como trabajador. La casa es grande, con un enorme pasillo que vertebra toda la vivienda, pero con estancias luminosas, ventilación cruzada y muchas virtudes de una vivienda moderna.
El caso es que los padres se hacen mayores, y las bañeras de 2 metros de largo, se hacen de muy difícil uso, sobre todo por la accesibilidad y resbaladicidad. Y esto requiere una inversión y una obra, cosa que es difícil de asumir si los propietarios son de avanzada edad, pero que esto no quita que sean necesarias.
Y para hablar a nuestro favor una obra supervisada por Arquitectos ahorra dinero a los clientes, y le da tranquilidad.
El cuarto de baño, volviendo al caso de mis padres, de hecho tiene una superficie de entre 6 y 7 metros cuadrados, está desproporcionado para los standares actuales, ya hemos hablado de la bañera pero el lavabo es de unos 80 centímetros de largo.
Lo que vengo a contar es que es muy importante el cambio de bañera a ducha, pero no olvidemos meditarlo bien ya existen muchas soluciones posibles.
En el caso de mis padres se podría retirar la bañera de gran formato, colocar un plato de ducha e incluso, contentando a las familias con niños pequeños, entraría también una pequeña bañera a continuación del plato de ducha.
Pasaré a nombrar las ventajas que conseguiremos con dicho cambio:
1º/ Seguridad y comodidad: el plato de ducha es más seguro debido a sus propiedades antideslizantes, y más cómodo porque no debemos levantar tanto la pierna.
2º/ Espacio: con la sustitución ganaremos espacio en nuestro cuarto de baño.
3º/ Ahorro: desde luego es más barata una ducha que un baño, ya que gastamos menos agua.
Y para finalizar comentaros que mis padres lo han hecho y a mejorado su calidad de vida, y su higiene…
Los cambios siempre son buenos. Una vez que tenemos todo reformado, toca comprar lo imprescindible y necesario de cada estancia del hogar, en el caso del baño, tendríamos que escoger toallas nuevas, albornoces, alfombras para el baño, etc. Un gusto poder disfrutar de un baño completamente nuevo.
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